En Europa, las muertes asociadas a la baja temperatura, aparición de humedades, moho, etc. en la vivienda ascienden anualmente a 38.200 personas, según datos de la OMS recogidos por la Asociación de Ciencias Ambientales. Mientras, el ruido es el responsable de cerca de 16.600 muertes prematuras y más de 72.000 hospitalizaciones.

En España los datos no son menos alarmantes: cerca de un 11% de la población no puede mantener su vivienda a una temperatura adecuada, y alrededor de 1.000 personas al año fallecen por enfermedades relacionadas con la contaminación acústica.

Como recuerda la Asociación Nacional de Fabricantes de Materiales Aislantes (ANDIMAT), el aislamiento de la envolvente de un edificio previene la aparición de patologías como filtraciones, humedades o moho, causantes de enfermedades respiratorias.

Andimat señala que la renovación de la envolvente de un edificio no solo proporciona importantes ahorros de energía y un menor impacto ambiental, sino que incide directamente en el bienestar y en la calidad de vida de las personas.

De igual manera, el aislamiento también atenúa la incidencia del ruido externo, proporcionando un mayor descanso y reduciendo los niveles de estrés que pueden desencadenar enfermedades cardiovasculares.

Desde la asociación instan a aprovechar las ayudas a la renovación del parque edificado para mejorar la calidad ambiental de los edificios, proporcionando un mayor confort térmico, acústico y de calidad del aire interior.

Más información en la web de Andimat.